jueves, 12 de junio de 2014

Pineapplelizada

Parece que vuelvo a la vida, vuelvo a ver la luz del sol, aquí, casi al final del túnel.

Para la vuelta podría haber preparado un post ingenioso, diferente... tanto tiempo sin actualizar me podría cundir para algo. Pero la verdad es que todavía estoy con la cabeza ida, entre pedagogos y palabros en inglés. Muy ida.

Pero bueno, entre tanta historia aburrida ya ha habido algo que se ha colado en mi mente y ha ocupado los rincones que quedaban libre: la piña. Una piña. Piñas everywhere. A mí que no me gusta comerla, ahora viviría entre ellas. Estoy por hacerme un Crusoe, ponerle ojos a una y tenerla aquí de compañía en mis noches de delirio. Pero hasta que llegue ese momento me ha dado por coleccionarlas, a modo de fotos, que no cunda el pánico. Parece que aquella piña que puse en mi vida, no hizo más que abrir la caja de Pandora.



Y suma y sigue... No sé cómo acabará todo esto...


Besos!


1 comentario:

  1. Jjajajaj Que miedo me das con esto de las piñas... Pues ya sabes hazte con un frasco de ananas fizz jejeje (voy aprendiendo jajaja)

    Un besote!!!

    ResponderEliminar